Píntame en colores,

Píntame de verde, amarillo y rosa.

Píntame a solas,

que no mire nadie.

Píntame libre,

sin el traje.

Píntame entre carcajadas

y algún que otro baile.

Soy un lienzo y una paleta de mil colores.

¿Quieres pintarme?

"Ojalá pudiera follar con mi alma,

ella sabe lo que quiero y yo lo que ella necesita"

Soy yo.

Soy mis cicatrices, las de dentro y las de fuera.

Soy la que aviva el fuego cuando quedan las brasas,

la que vive sin vivir,

la que sabe cuanto lleváis dentro cuando ni siquiera vosotros lo sabéis.

La que le susurra al viento

y juega con tu pelo.

Soy la llama y el agua.

La sequía y la gota fría.

El beso y el rechazo.

El miedo a sentir.

Risa y llanto.

Latido y morir.

Y sobre todo soy todo lo que queda por venir.

"Varias cosas prueba sin parar, me gusta contemplarla.
En su mundo ella es tan feliz como un día de playa..."

¿Nunca os han hecho ilusión unos zapatos nuevos?

Oigo música sin escucharla,

y miro al techo pensando...

¿Por qué todo es más fácil cuando no estás?

La vida da vueltas,

arranca,

avanza,

frena,

retrocede...

Vuelve a arrancar,

te aprieta.

Duele.

Llegó a su destino.

-Es cierto. Tienes razón. No se lo que quiero.

Me engaño a mi mismo.

Quiero todo y nada.

Lo justo. me siento fuerte y siento miedo. Me da miedo sufrir.

No quiero reir porque puedo llorar, no quiero vivir porque puedo morir...

-Lo que te pasa, -me dijo María, tan tranquila, tan severa-

es que quieres tocar el cielo con la punta de los dedos sin que el sol te queme las alas.

Pero eso es cosa de ángeles, no de vagabundos.

Una mirada melancólica derritió el hielo de sus ojos.

María cogió mi cabeza entre sus manos.

Me besó en la frente.

Un beso tibio.

Un beso de madre.

¿A que es bonita?

Gracias

Has vuelto para decirme

que la ultima vez que me dijiste adiós era mentira,

no te ibas.

Para restregarme que vas a estar aquí, toda mi vida.

No te importa si hay sol o llueve,

vas a volar hasta mi ventana,

te colarás por las rajitas de la persiana,

y sin darme cuenta,

bajarás por mi garganta,

y te harás un nudo.

Se me olvidó la primera letra de tu nombre,

el modo en que mirabas,

tu olor,

las películas que te gustaban,

el color que traías a mi vida.